_Acércate
dulce amada_
(Soneto
alejandrino)
Suspiro de
mis sueños me muero y no he vivido
No ves buscan
tus besos los míos suspirados.
Prodíguenme ternura
tus labios adorados,
y deja que
acaricie jardín tan florecido.
Anhelo ensimismado tu cuerpo enloquecido,
que ávido me
entregue sus dones tan sagrados,
dejando nos enciendan los fuegos desatados,
llenándonos de amores y cálido gemido.
dejando nos enciendan los fuegos desatados,
llenándonos de amores y cálido gemido.
Vibremos de
placeres matando así las penas
Bebamos de
los frutos los más ricos licores
y llenos del embrujo oiremos las sirenas
hablar con suspicacia al ver nuestros fervores,
atados por los lazos de bocas muy serenas,
pintando un
mundo hermoso, creado con amores.